El Global Madrid | viernes, 07 de diciembre de 2018 h |

A punto de finalizar el 2018 y tras más de tres años de autorización para la venta online de medicamentos no sujetos a prescripción médica en España —desde julio de 2015—, las oficinas de farmacia no acaban de lanzarse a la puesta en marcha de tiendas online para este tipo de fármacos.

Según datos de Distafarma (la web impulsada por la Aemps que recoge el listado de establecimientos autorizados) de los que se hace eco Asefarma, son 500 las farmacias que a día de hoy cuentan con el sello que les autoriza para vender online. Este número supone que el 2,72 por ciento del total de la red (algo más de 22.000 boticas), cuenta con tienda online para medicamentos OTC y EFG.

Por comunidades autónomas, Cataluña (con un total de 131 farmacias online) y Madrid (93 farmacias online) son las que lideran ‘el ranking’ en España con mayor número de farmacias autorizadas para la venta por Internet. Comunidad Valenciana (con 79) y Andalucía (con 42) les siguen la senda.

A nivel general, pueden ser varias las razones por las que el número de farmacias online en España parece no arrancar desde que a nivel normativo se aprobó la venta por Internet de medicamentos no sujetos a prescripción médica.

Como causa de este desinterés, desde la consultoría Asefarma se señala una posible falta de conocimiento en materia informática, falta de tiempo y desconocimiento de la carga de trabajo que puede llevar a un farmacéutico embarcarse en este nuevo proyecto, falta de una rentabilidad inmediata y, sobre todo, a la falta de interés por parte de los farmacéuticos de más edad.

De hecho, “desde el punto de vista de los farmacéuticos, aún son pocos los que realizan su venta online porque la propia gestión del comercio electrónico les supone aún mucho tiempo de dedicación”, indica Adela Bueno, responsable del departamento Jurídico de Asefarma.

“Además –continúa la responsable de Asefarma– debemos tener en cuenta que la normativa reguladora de la venta online de medicamentos de uso humano no sujetos a prescripción médica exige determinadas cautelas y protocolos de actuación, propios del canal de venta utilizado (página web) y con los que los titulares de mayor edad no están del todo familiarizados”.