El Global Madrid | viernes, 10 de marzo de 2017 h |

La oficina de farmacia intenta evitar la contratación indefinida para no consolidar puestos de trabajo, por ello se suele optar por la contratación temporal. Esa es una de las tendencias que recoge el último informe Anual Aspime de Oficinas de Farmacia 2016 (ver gráfico), realizado con los datos fiscales de la Renta de 2015. De este modo, ante una contratación indefinida, los titulares quieren probar antes la valía y asegurarse que la persona contratada va a encajar.

Esto ha llevado a que la media de empleados fijos se redujera en 2014 con 3,19 ya que en 2011, había 3,66, en 2012 era 4,07 y en 2013 de 3,45. El promedio de empleados eventuales es de 0,39; 0,62; 0,32 y 0,43 respectivamente de 2011 a 2014. Además, la plantilla media en 2014 es de 3,76 trabajadores, con lo que ha habido un descenso en comparación con 2013 (3.89) y 2012 (4,54).

En cuanto a los salarios, durante 2012 y 2013, la media de los farmacéuticos ha sido similar a los salarios de años anteriores, de 27.000 euros aproximadamente, aunque el salario bruto variará según las funciones y responsabilidades. Igualmente durante el 2014 se mantiene. Lo mismo sucede con el salario bruto anual de un auxiliar diplomado es de 22.000 euros, y el bruto anual de un auxiliar es de 20.000 euros. Y de cara al próximo año, hay que recordar que los salarios subirán un 2 por ciento, y un 1,5 por ciento respectivamente en 2018 y 2019.

Así, la distribución de las categorías laborales del personal de la botica española depende en gran medida de la facturación de la oficina de farmacia. En las oficinas de farmacia de mayor facturación, prácticamente la mitad de sus empleados son farmacéuticos, en muchas ocasiones por exigencias legales. Mientras que, en las farmacias con una menor facturación, ante la contratación de un empleado, en escasas ocasiones se opta por contratar a un farmacéutico, dado que la presencia del propio titular en la Oficina de Farmacia es constante. Sin embargo, las farmacias con menos facturación intentan ajustar al máximo los costes y por ello se opta casi siempre por la contratación de un auxiliar, cuyo coste es inferior.

En la comparativa de la evolución de las categorías profesionales, en los últimos años, la figura del farmacéutico es preeminente en boticas con elevada facturación. Aspime recomienda que antes de contratar a un nuevo empleado y negociar el salario tenga clara la oferta económica que se quiere proponer y/o formular, teniendo en cuenta el salario marcado en convenio. Aunque también recuerdan que el titular puede buscar retribuciones alternativas para motivar al trabajador y retenerlo en la empresa.