El Global Madrid | viernes, 07 de diciembre de 2018 h |

En la transmisión de una oficina de farmacia pueden surgir conflictos, durante o después de la misma, si tanto vendedor como comprador no atienden y se anticipan a situaciones relativas a variables como ventas, contratos de arrendamiento, compras, stock, personal, horarios, derechos de adquisición preferente, contratos con terceros, requisitos y trámites sanitarios y administrativos, entre otras muchas.

En este sentido, como así alertan desde Farmaconsulting, compañía especializada en la compraventa de boticas, uno de los aspectos sobre los que conviene prestar atención es la gestión del stock. Esta es “una de las cuestiones que más valorará el inversor a la hora de comprar una farmacia”, apuntan desde Farmaconsulting.

Según concretan, el posible comprador “querrá en primer lugar contener el importe que ha de invertir en la compra de existencias, pero que sea a su vez suficiente para no dar faltas que puedan dañar la imagen y el adecuado funcionamiento de la farmacia” desde el primer día tras la adquisición.

En las recomendaciones para el vendedor, desde Farmaconsulting se indica que “el comprador se sentirá especialmente confortable si observa que hay pocas referencias de baja rotación y además su nivel de stock está ajustado a esa circunstancia”.

Igualmente, “también querrá ver que no va a encontrar en las estanterías y cajoneras producto obsoleto o deteriorado”. Y donde probablemente pondrá “especial atención”, a juicio de esta entidad, será “en prever que no compra producto caducado, imposible de dispensar, o que la caducidad sea tan próxima que no permita su salida antes de que se cumpla”, apuntan desde esta compañía especializada en transacciones.