E. C. Madrid | viernes, 10 de noviembre de 2017 h |

Ante la aparición de nuevos perfiles de clientes en la farmacia y de otros agentes distribuidores, las boticas deben estar atentas para ofrecer servicios y responder a las necesidades y requerimientos de los nuevos usuarios. Asimismo las farmacias, para no quedarse atrás, deben generar nuevas vías de ingresos y nuevos servicios remunerados.

A tal efecto, la compañía Luda Partners puede arrojar luz con la puesta en marcha de un sistema destinado a las oficinas de farmacia denominado Internal Inquierer Manager (IIM), un sistema informático autónomo que se integra fácilmente con las herramientas de gestión interna implantadas en las farmacias, funciona 24 horas al día los siete días de la semana, y está integrado por cuatro módulos.

“Sois el sector que mejor funciona de la sanidad española, un sector que, cuando ha colaborado, funciona muy bien, no obstante, el problema es que no lo hacéis a nivel tecnológico”, describía Luis Martín, cofundador de Luda Partners, durante la presentación de IIM, animando a la red de 22.000 farmacias a que se apoyaran en las herramientas de las NN.TT.

La principal función del sistema, bautizado como “el preguntador”, es lanzar a los sistemas de gestión de las boticas preguntas hechas por otras farmacias o por los propios pacientes y destinadas a conocer la disponibilidad de un producto en un determinado momento.

Módulos y beneficios del “preguntador”

Entrando en materia, los cuatro módulos que conforman IIM son, la intercomunicación entre farmacias para evitar desabastecimientos, es decir, “poder preguntar a otra farmacia cercana si tiene un producto que tú no tienes y mandar al cliente a esa farmacia que te pagará por remitir al paciente entre un 7 o un 10 por ciento del producto”, explicaba Martín.

Asimismo, consta de una app para el paciente con el fin de conocer la disponibilidad de un producto para poder reservarlo y que la botica decida enviárselo.

“Debéis conocer el precio de los enemigos. Vuestra ventaja es que actuáis rápido y podéis cambiar el precio en un día y otros necesitan una semana”. Ante esa necesidad de conocer el precio de los nuevos jugadores que entran en el mercado, IIM dispone de un comparador de precios en tiempo real de grandes superficies o plataformas como Amazon, y esto a su vez genera un subproducto que es la central de compras.

Finalmente, Martín destacaba que “sólo puede haber una red. Amazon quiere ser una amenaza pero con vuestra coordinación y unidad es imposible”.