J. Ruiz-Tagle Madrid | jueves, 08 de noviembre de 2018 h |

Aunque cambien los discursos, los procedimientos son difíciles de modificar, y la política sanitaria, con independencia del color político del Gobierno de turno, se sigue moviendo con los mismos vicios, heredados y casi crónicos. Uno de los platos fuertes que la semana pasada juntaba a las comunidades autónomas y al Ministerio de Sanidad en la reunión preparatoria del Consejo Interterritorial, la presentación del Plan de Abordaje de Terapias Avanzadas, con las terapias CAR-T como protagonistas, volvió a tropezar con la misma piedra de siempre: la de la financiación.

La mayoría de las comunidades asegura que tienen “una oportunidad magnífica para atender” una demanda social y aprovechar la posibilidad existente para hacer “una planificación asistencial”. Pero en la Delegada se quedaron a medias. “No hay memoria económica y por tanto no sabemos si habrá un fondo estatal o correrá a cargo nuestro. Estas terapias, que atañen sobre todo a la oncohematología, vienen a sustituir a otros medicamentos con precios que son superiores”, aseguran fuentes asistentes a la Comisión consultadas por EG. En esta línea, algunas regiones solicitaron enmarcar la medicina de precisión (matriz del Plan presentado) “de forma poblacional y no individualizada para ver las bondades que le van a suponer a los pacientes del SNS”.

El de las terapias CAR-T fue sólo uno de los puntos que plagaron una jornada maratoniana en el Ministerio de Sanidad. El orden del día constaba de 27 puntos que, a su vez, se desdoblaron hasta llegar a los 34. La previa del Interterritorial que tendrá lugar el 15 de noviembre acabó con bastantes acuerdos que, más allá de la medicina de precisión, llevan consigo puntualizaciones importantes de cara a su implantación real en el SNS.

Otro de los puntos de mayor relevancia fue el relativo al calendario vacunal. En este apartado hubo dos debates: el referente al calendario para los grupos de riesgo y el del calendario a lo largo de toda la vida. En el primero hubo un consenso absoluto y las comunidades aceptaron el documento del ministerio, al que calificaron como “ponencia muy trabajada”.

Para el segundo hubo observaciones importantes. Hay consenso sobre la necesidad de adoptarlo, pero se pide tiempo y mayor eficiencia. “Se contempla incluir 14 enfermedades y nos pareció bien, pero hubo sugerencias para que se sea flexible en los plazos. Queremos ir poco a poco a lo largo de 2019 porque los profesionales necesitan formación. Además, las comunidades tenemos y queremos estar pendiente del acuerdo marco de adquisición de vacunas. Hay que mejorarlo”, aseguran las fuentes consultadas, conscientes de que se tendrán que adquirir nuevas vacunas.

La Delegada también trató la financiación de los sistemas flash de monitorización de glucosa para adultos. Las comunidades destacan que adquirieron “un compromiso muy importante porque se primará la equidad”, si bien no habrá financiación generalizada. Los pacientes que se beneficiarán de forma inmediata serán aquellos con discapacidad visual o limitaciones funcionales graves, los diabéticos tipo 1 con hipoglucemia de repetición y las pacientes embarazadas. “Estos son los grupos prioritarios aunque es cierto que no representan a la mayoría de pacientes”, aseguran fuentes autonómicas que tampoco fueron capaces de desterrar la posibilidad de que se instauren visados para algunos casos.

Por ultimo, la previa del CISNS también trató la actualización del Plan de Hepatitis C. Se hizo de una manera “descafeinada” porque, matizan las fuentes, no se debatieron las fórmulas de cribado que la encuesta de seroprevalencia aconsejaba. “Llevamos a cabo una discusión sobre las necesidades de promoción de la salud y prevención, que también son puntos importantes del Plan Nacional de 2015”, resaltan las mismas fuentes.