Ángela de Rueda Londres | viernes, 24 de noviembre de 2017 h |

La incertidumbre se ha terminado y las quinielas casi acertaron, aunque el resultado final se decidiera por sorteo. Ha habido algo de tiempo para asumir la derrota y digerir que la sede de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) se ubicará en Ámsterdam, una de las tres ofertas que mejor cumplían los requisitos técnicos exigidos.

Puestos a elegir, o para ser exactos, a sortear, mejor que la elegida haya sido la capital neerlandesa, que no otra opción que habría supuesto una verdadera catástrofe para la continuidad de la actividad de la Agencia. Aunque la sensación tras la derrota de Barcelona es que se ha perdido “la posibilidad de que los debates de referencia del sector farmacéutico se desarrollaran dentro de casa, con sus beneficios”, manifestó Eduardo Sánchez-Iriso, presidente de la Asociación de Economía de la Salud (AES).

Barcelona y Milán eran las otras dos candidaturas que configuraban el pódium de favoritas, como recogía el informePatients First Perspective on EMA Relocationde la Fundación de Ciencias del Medicamento y Productos Sanitarios (Fundamed). El documento analiza la interrelación entre los criterios que establecía la Comisión Europea, la actividad de la EMA y los que analizó Fundamed dado que ejercían una mayor influencia en los pacientes (ver gráfico).

Criterios como la capacidad de retención del personal, encabezada por Ámsterdam, Barcelona y Milán determinarían que el trabajo de la EMA se ralentice en mayor o menor medida. También el apoyo de la agencia local, la accesibilidad y la disponibilidad de un edificio adecuado para las actividades de la Agencia, en áreas como la aprobación de fármacos o las inspecciones.

Si bien las encuestas internas revelaron que la mayoría del personal se trasladaría a Ámsterdam con la EMA, “incluso en este caso, nuestras actividades se verán afectadas y tenemos que planificarlo ahora para evitar la creación de lagunas en el conocimiento y la experiencia”, apunta su director Guido Rasi.

Tomada la decisión, es tiempo de colaborar para ayudar en la mudanza a Ámsterdam porque “es vital garantizar la continuidad de las funciones críticas de la EMA, su capacidad para retener personal y acceder a redes de expertos”, apuntó Stefan Oschmann, presidente de la patronal europea EFPIA.

Las frases
“Barcelona era la mejor candidatura bajo criterios objetivos y técnicos… Espero que sea el último daño que hace el independentismo a Cataluña y al resto de España”
Guido Rasi, director ejecutivo de la EMA
“Nuestras actividades se verán afectadas y tenemos que planificar esto ahora para evitar la creación de lagunas en el conocimiento y la experiencia”
Stefan Oschmann, presidente de la patronal europea EFPIA
“Es vital garantizar la continuidad de las funciones críticas de la EMA, su capacidad para retener al personal y de acceder a redes de expertos”
Eduardo Sánchez-Iriso, presidente Asociación de Economía de la Salud
“No ha perdido una agencia política; sino la posibilidad de que los debates de referencia del sector farmacéutico se desarrollaran dentro de casa, con sus beneficios”