Esther Martín Campo Madrid | viernes, 16 de septiembre de 2016 h |

Los ministros de Salud de los siete países más ricos del mundo se han comprometido a impulsar la aplicación de medidas para el cuidado de los enfermos con demencias, así como para el desarrollo de tratamientos para este tipo de patologías, en aumento como consecuencia del envejecimiento de la población. Es una de las conclusiones principales de la última reunión de los responsables sanitarios que integran el G7, celebrada en Kobe (Japón), en la que también se acordó estrechar las medidas para luchar contra enfermedades infecciosas como el ébola y las resistencias a los antibióticos.

La Confederación Española de Alzhéimer (Ceafa) ha recibido con una gran satisfacción esta noticia, que refuerza su demanda de una política de Estado que aborde de una forma integral las consecuencias de este grave problema sociosanitario.

Desde la confederación se insiste en que ya en 2013 los ministros de Salud del G8 se reunieron en Londres para hablar del alzhéimer, y ahora el foco vuelve a estar en las demencias. Ceafa recuerda que alrededor de 47,5 millones de personas padecen este síndrome en todo el mundo y se prevé que el número de afectados ascienda a 135,5 millones en 2050, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En España, una de cada cuatro familias tiene una persona afectada por ésta u otras demencias y se espera un incremento importante en los próximos años a causa del citado envejecimiento creciente de la población.


47,5 millones de personas padecen Alzheimer según Ceafa, cifra que puede ascende a 135,5 para el año 2050


En la declaración conjunta de los representantes de Canadá, Alemania, Italia, Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Japón se reconoce la importancia de construir un sistema de atención para estos enfermos en las comunidades en las que residen, impulsar medidas para un diagnóstico precoz de las demencias, desarrollar políticas que mejoren la calidad de vida de los pacientes y potenciar la investigación.

Desde hace años, Ceafa y el Grupo Estatal de Demencias trabajan de forma activa para avanzar en una política de Estado de alzhéimer y otras demencias en colaboración con todos los agentes implicados en la resolución del problema. En opinión de sus responsables, “ya únicamente es cuestión de voluntad política poner en marcha los mecanismos institucionales que cada país tiene en su poder para que no caiga en saco roto la declaración del G7” .

Por otra parte, este acuerdo se produce en la antesala de la celebración del Día Mundial del Alzhéimer, que se conmemora el próximo 21 de septiembre. La campaña de este año fue presentada hace unos días en la sede madrileña del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso).

Con “c” de cuidador

En esta ocasión, Ceafa apuesta por poner el acento en la “c” de cuidador. “No olvidemos que el 94 por ciento de las personas con demencia es atendido por sus familias”, insisten sus portavoces. Según datos del informe El cuidador en España. Situación actual y propuestas de futuro, elaborado por la confederación en colaboración con Sanitas, el coste medio anual de la enfermedad alcanza los 31.000 euros. Además, el cuidador familiar principal llega a presentar hasta en el 50 por ciento de los casos alteraciones físicas, psicológicas y sociales por el ejercicio de los cuidados, que pueden llegar a durar 15 o más años. De ahí que la confederación insista en el reconocimiento de la figura de cuidador familiar, así como en la necesidad de proporcionar recursos durante la atención y después de esta etapa de cuidados.

El lema escogido para este año, “Comparte corazón”, se difundirá a partir de unos dípticos informativos que contienen notas autoadhesivas y una guía para construir un mural con forma de corazón que contiene la inicial de la palabra cuidador. Los organizadores de la jornada invitan a las empresas e instituciones, que recibirán el envío en estos días, a completar el montaje en una ventana o pared y compartir sus fotos en las redes sociales con el hashtag #conCdeCuidador.