Un tuit compartido esta semana por la Plataforma sinazucar.org sitúa en el centro del debate los productos de alimentación infantil. En un contexto en el que algunas compañías del sector alimentario apuestan ya por la reformulación de sus productos para reducir el contenido de este compuesto, algunos productos, con presencia en todos los hogares españoles, como los derivados lácteos, preservan una imagen saludable ante los ciudadanos que no siempre es real.
Desde esta plataforma, su portavoz, Antonio Rodríguez, alerta de la falta de conciencia social sobre la presencia real de azúcares en este tipo de productos. “La mayoría de los consumidores confía en que la formulación de los alimentos infantiles es la adecuada para las necesidades nutricionales de los niños, aunque en multitud de ocasiones nos encontramos que son productos que contienen demasiado azúcar”, explica.
Para muestra, la imagen compartida por las redes sociales, que sitúa junto a un brick de leche y cereales de una conocida marca el equivalente a 3,4 terrones de azúcar.
Un brik de Puleva Peques (200ml) contiene 13,6g de azúcares, equivalente a 3,4 terrones.
Con el sello de la Asociación Española de Pediatría @aepediatria pic.twitter.com/YM86bGO8vb— sinAzucar.org (@SinAzucarOrg) 2 de diciembre de 2019
Rodríguez subraya que al igual que en el resto de productos para adultos, en estos casos también se debería informar de forma clara, en la parte frontal del envase, si el producto es alto en azúcares. “En el caso de los productos infantiles, se podría limitar el uso de dibujos y personajes en el empaquetado de los productos altos en azúcares. De esta forma se hace menos atractivo el producto para los niños”, sugiere.
Entre los productos de consumo habitual para niños que contienen un elevado aporte de azúcar destaca los productos lácteos (batidos, yogures, smoothies), “que suelen contener más azúcar que la versión para adultos”.
“También aportan bastantes azúcares los zumos y néctares y los cacaos solubles que se utilizan habitualmente en muchos desayunos pueden contener hasta un 75 por ciento de azúcar”, alerta.
Por último, Rodríguez recuerda que también es habitual un consumo diario de galletas, lo que supone una importante cantidad de azúcar.
Frente a estos productos, el portavoz de la plataforma añade que hay alternativas. Lo ideal es acostumbrar el gusto de los pequeños a los sabores de los productos sin azúcar, advierte. “Por ejemplo, es mejor dar un yogur natural a uno de sabores. Y si deseamos endulzarlo, mejor utilizar trocitos de fruta picados”, sugiere. En la misma línea, destaca que es preferible un vaso de leche a un batido o leche con cacao, y remarca que las galletas equivalen a bollería industrial, por lo que conviene evitarlas. Con respecto a la fruta, lo ideal es tomarla entera, concluye.
