CARMEN M. LÓPEZ Madrid | viernes, 12 de enero de 2018 h |

El año nuevo ha llegado fuerte en materia de salud pública. La crisis de las resistencias antimicrobianas (AMR) es una prioridad y la agenda en este sentido la está marcando Europa.

De lo que no hay dudas es de que los pasos que da España son analizados por la comunidad internacional con lupa. El Plan Nacional avanza, gracias al esfuerzo conjunto de profesionales y ministerio, pero todavía quedan algunos flecos en materia de formación. ¿Será el 2018 el año de la especialidad de infecciosas?.

El año se cerraba con una PNL aprobada, casi por unanimidad, en el Congreso en la que insta al Gobierno a su creación para avanzar con las resistencias y equipararse al resto de países de la Unión Europea. Es destacable que España sea el único país relevante de la zona comunitaria que no cuenta con esta acreditación. Es por ello, que las formaciones políticas consideran fundamental su aprobación y no cesarán de insistir al Gobierno en su cumplimiento, ya que “hay mucho que perder”.

Como explica el portavoz socialista, Jesús María Fernández, el Gobierno debe centrarse en plantear la especialidad. “Debido a la anulación del decreto de troncalidad, el Ministerio aseguró que sacaría adelante decretos de especialidades”, apunta. En su opinión, las unidades asistenciales de infecciosas están presentes en todos los hospitales, por tanto, “no habría que crear nada, ya que son unidades acreditadas”. Fernández insiste en que “si no se reconoce la especialidad no aprovecharemos todo el potencial de la realidad asistencial y científica de España”.

Por su parte, el portavoz de la formación naranja, Francisco Igea, explica que desde Ciudadanos seguirán preguntando al Gobierno por el cumplimiento de la PNL. Considera que es una oportunidad sacar adelante este decreto que además no tiene oposición.

Rubén Moreno, diputado del PP y coordinador de las comisiones del Congreso, lo tiene claro: la pelota está en el tejado de la Comisión de Recursos Humanos para su abordaje en el Consejo Interterritorial. Esto conlleva una ventaja y es el amplio consenso entre comunidades que existe. “Parece que puede haber acuerdo en crear la especialidad, pero es la Comisión la que decidirá”. Moreno además destaca que lo importante es que la atención al paciente sea la adecuada. “Si existe especialidad y las enfermedades infecciosas son tratadas mejor, pues adelante”, augura Moreno.

De hecho, el presidente de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (Seimc), José Miguel Cisneros, no tiene dudas de ello. “La especialidad mejorará el pronóstico de los pacientes con infecciones graves y complejas, reduciendo su mortalidad. Está demostrado que los especialistas en infecciosas reducen la mortalidad de los pacientes con infecciones bacterianas y víricas graves”, destaca.

A su juicio, mejorará también el uso de los antimicrobianos y reducirá la diseminación de las resistencias. “España ocupa el primer lugar del mundo en consumo de antibióticos y uno de los primeros en resistencias microbianas”, recuerda, al tiempo que insiste que los especialistas son claves en el liderazgo de los equipos de PROA y de control de infección.

Europa avisa

De lo que no hay dudas es de que a Europa le preocupa que España no tenga una capacitación aprobada. “No existen especialistas en infecciosas”. Así lo pone de manifiesto la ECDC en su informe sobre su visita a España, donde hace una serie de recomendaciones entre las que destaca la creación de la especialidad. El objetivo de esta visita era proporcionar una evaluación basada en la evidencia con respecto a la prevención y control de la resistencia a los antimicrobianos mediante el uso prudente de antibióticos y el control de infecciones. “Dado el alcance y la escala de la amenaza planteada por AMR en general puede ser aconsejable revisar el alcance de la práctica de los especialistas en medicina preventiva en hospitales y ampliar el número de estos especialistas específicamente dedicados a la prevención y control de infecciones en la sanidad española”, asegura el informe. Las enfermedades infecciosas no están reconocidas como una especialidad médica, lo que significa que “no es posible capacitar a especialistas y esto inevitablemente tiene un impacto en el reclutamiento de médicos especialistas en enfermedades infecciosas en los hospitales”.

Con todo, y como asegura Cisneros la aprobación de la especialidad sería coherente con la política sanitaria llevada a cabo por los diferentes gobiernos regionales, que en estos últimos 30 años han creado más de 50 unidades y servicios de enfermedades infecciosas en las diferentes autonomías. Además de obtener el consenso político, “será aplaudida por las asociaciones de pacientes que de manera unánime reclaman la especialidad”, así como sociedades científicas.

En materia profesional, reconocerá el profesionalismo de “los cientos de infectólogos sin papeles con formación autodidacta”, que llevan 30 años en primera línea respondiendo a las crisis sanitarias. “La medicina que salva la vida de los pacientes con enfermedades graves, es la medicina moderna, es la medicina de las especialidades, y esta es la medicina de nuestro país gracias a la vía MIR”, subraya Cisneros.


Rubén Moreno,



diputado del PP y coord. de las comisiones



“Parece que puede haber acuerdo en crear la especialidad pero es la Comisión de RR.HH. la que tiene que decidir”



Jesús María Fernández,



portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad



“Las unidades asistenciales están presentes y creadas en todos los hospitales y comunidades”



Francisco Igea,



portavoz de C’s en la Comisión de Sanidad



“Desde luego es una oportunidad sacar adelante este decreto, que además no tiene oposición”



José Miguel Cisneros,



presidente de la Seimc



“La especialidad mejorará el pronóstico de los pacientes con infecciones graves y complejas, reduciendo su mortalidad”