GM Madrid | lunes, 05 de noviembre de 2018 h |

Científicos de toda Europa, incluyendo la Universidad Brunel de Londres y la Universidad de Exeter (Reino Unido), han identificado 14 nuevas variantes genéticas que aumentan la obesidad y, a su vez, contribuyen a disminuir el riesgo metabólico.

El equipo examinó los datos del banco biológico del Reino Unido de más de 500.000 personas de entre 37 y 73 años, utilizando imágenes de resonancia magnética (IRM) de las cinturas de estas personas para hacer coincidir dónde almacenaban grasa adicional con si mostraban signos de diabetes tipo 2, infarto y riesgo de ictus.

Así, encontraron 14 variaciones genéticas o cambios en la molécula de ADN relacionada con un mayor índice de masa corporal (IMC) pero menor riesgo de diabetes, presión arterial y riesgo de enfermedad cardiaca. El estudio, publicado en la revista ‘Diabetes’, mostró que, a medida, que aumentan de peso, las personas que llevan estos factores genéticos lo almacenan de manera segura debajo de la piel y, por lo tanto, tienen menos grasa en sus órganos principales como, por ejemplo, el hígado, páncreas y riñones.

“Hay muchas personas con sobrepeso u obesidad que no tienen los riesgos de enfermedad metabólica esperados asociados con un IMC más alto. Mientras tanto, algunas personas con peso magro o normal desarrollan enfermedades como la diabetes tipo 2. Nuestros hallazgos ayudarán a comprender los mecanismos que retrasan o protegen a las personas con sobrepeso u obesidad para que no desarrollen resultados metabólicos adversos, como la diabetes tipo 2, la enfermedad cardiaca y la hipertensión”, han comentado los expertos.

Los datos de imágenes de resonancia magnética de todo el genoma y abdominales proporcionan evidencia de que un fenotipo de adiposidad favorable determinado genéticamente se caracteriza por una menor grasa ectópica del hígado y un menor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedad cardiaca e hipertensión-