Marta Riesgo Madrid | viernes, 15 de junio de 2018 h |

Los medicamentos biosimilares se perfilan como herramienta clave de ahorro para el Sistema Nacional de Salud. No obstante, faltan políticas, tal y como asegura Raúl Jiménez, director regional de biosimilares de la compañía Biogen, que aseguren la penetración de estos medicamentos en el sistema. Eso sí, destaca la necesidad de apostar por la formación y, sobre todo, tener en cuenta siempre el papel decisivo del clínico.

Pregunta. Acaba de asumir hace un par de meses la dirección del área de biosimilares de Biogen, ¿Cómo asume este reto?

Respuesta. Estoy muy contento. En estos dos meses me ha dado tiempo a darme cuenta de que compañía es Biogen, y poder analizar el espectacular pipeline y portfolio del que dispone. Son productos para patologías realmente complejas y estoy muy orgulloso de poder formar parte de esta compañía.

P. En 2016 consiguieron la doble aprobación para comercializar Flixabi y Benepali, convirtiéndose en la única biotecnológica con dos terapias anti-TNF comercializadas en España. ¿Cómo están evolucionando estos en el mercado?

R. La evolución de los biosimilares en el mercado está siendo mucho más lenta de lo que debería porque las políticas que se establecen a nivel nacional todavía no son las adecuadas. Es cierto que la administración está trabajando en ello pero, en un sistema descentralizado, cada comunidad trabaja en su línea. Hay muchas comunidades que tienen implantadas cuotas y eso da una mayor penetración, pero se pueden hacer otras políticas. En otros países la penetración alcanza el 80 por ciento y en España algunas moléculas no llegan al 15 por ciento.

P. ¿Espera que el nuevo Gobierno apueste por estos medicamentos con un marco normativo claro?

R. Los biosimilares son la salvación del SNS. Todas las innovaciones generan un coste muy elevado difícil de afrontar. Es cierto que son tratamientos que aportan grandes beneficios para los pacientes, pero se necesitan alternativas que generen ahorros, y los biosimilares son productos de muy alta calidad que pueden producirlos. Cualquier gobierno que quiera implementar medidas que aceleren la entrada de estos biosimilares será bienvenido.

P. ¿Qué propuestas le plantearía al Ministerio de Sanidad?.

R. Pediría que cualquier paciente näive sea tratado directamente con el medicamento biosimilar. Otra de las medidas es que todas las comunidades autónomas tengan estipulada una cuota para los biosimilares y, sobre todo, que se cumplieran esas cuotas. Las comunidades autónomas con cuotas implantadas y que cumplen con las mismas están consiguiendo muchos más ahorros que otras.

P. Uno de los principales debates se encuentra en la intercambiabilidad de estos medicamentos ¿Cuál es su postura?.

R. Al final el médico es el responsable del paciente y tiene que estar envuelto en el proceso de decisión. No se pueden tomar decisiones sin tener en cuenta a los médicos. Creo que si se apuesta por el modelo de pacientes näive, los clínicos tendrán más experiencia y, por tanto, tendrá menos miedo a estas nuevas moléculas. El médico es clave en todo el proceso.

P. La patronal Biosim insiste en la necesidad de apostar por la información y la formación ¿se ha avanzado algo en este sentido?

R. Se ha avanzado mucho en los últimos años, pero es verdad que la formación siempre viene de la industria. Si miramos atrás vemos que la diferencia es abismal; ahora la resistencia es mucho menor. En Biogen llevamos 40 años desarrollando biológicos, que se desarrollan en los mismos bioreactores donde se hacen los productos biosimilares, por tanto los estándares de calidad y el conocimiento está más que garantizada.