El Global Madrid | jueves, 31 de mayo de 2018 h |

Los ERP (Enterprise Resource Planning), los sistemas de planificación de recursos empresariales, constituyen una de las piezas clave en la transformación digital en el sector farmacéutico, según informa la tecnológica Sothis, quien subraya que ayuda a afrontar los retos normativos, de seguridad y de calidad que marcarán la competitividad futura de las empresas de este ámbito.

En este sentido, se apunta que el sector farmacéutico agrupa empresas con una gran cultura de innovación hacia sus productos, “pero en ocasiones no han sido capaces de trasladar esta filosofía a la generación de mejoras en sus propios procesos productivos y organizativos. Por otro lado, las empresas del sector sanitario y sus consumidores son cada vez más conscientes de los riesgos y los beneficios, por lo que demandan garantías e información completa y veraz sobre todo el proceso productivo, desde el origen de las materias primas hasta el uso por el consumidor final. De ahí la necesidad de los ERPs”, asegura la compañía en un comunicado.

Para responder a esta necesidad, Sothis recomienda el software de gestión empresarial SAP por su “elevada integración de los procesos; la ayuda a las compañías a explotar mercados internacionales; además, se halla a la vanguardia de la tecnología con SAP S/4HANA y cuenta con un sistema orientado a la confiabilidad, el cumplimiento y la validación”. De esta manera, se da un salto cualitativo en la forma de trabajar en el sector farmacéutico.

Con este tipo de tecnologías, áreas de interés como la gestión logística de los estudios clínicos, la innovación y el desarrollo de producto, la seguridad y la sostenibilidad embebida en los procesos o el cumplimiento de los requerimientos normativos y de calidad se permitirá a la empresa farmacéutica optimizar y mejorar el valor añadido.

Asimismo, las nuevas tecnologías, como las aplicaciones en movilidad o el Big Data, posibilitarán la mejora de la adaptabilidad de las compañías a situaciones cambiantes generadas por las necesidades de eficiencia internas, las demandas del mercado o las presiones normativas de las autoridades.

Según Sothis, en este contexto, resulta fundamental asegurar no solo la calidad del producto final sino también la de los procesos y la organización: “Para ello es necesario que las empresas farmacéuticas desarrollen sistemas de validación continuos que incluyan a los sistemas de información y aprovechen el valor añadido que dichas tecnologías pueden ofrecer para facilitar esta gestión”, sentencian.