L. Díaz Madrid | viernes, 18 de octubre de 2019 h |

La acción de Biogen cotiza actualmente en 225,6 dólares americanos moviéndose en la franja inferior de su rango de variación del último año. Su perfil en este periodo ha sido eminentemente bajista, acumulando una pérdida en el año cercana al 35 por ciento, situándose entre los valores del sector farmacéutico con peor evolución en este periodo.

Este valor sufrió una intensa caída el pasado mes de marzo tras anunciar el abandono de su proyecto para desarrollar un nuevo fármaco, Aducanumab, destinado al tratamiento del Alzheimer que se encontraba en fase III de desarrollo y que se estimaba que podría tener un impacto muy significativo en los resultados del grupo.

Analizando un periodo temporal más amplio se puede observar la elevada pérdida que acumula este valor desde 2015, pasando de cotizar en 473 dólares americanos, su máximo histórico marcado en marzo de ese año, a moverse en los niveles actuales, un 50 por ciento por debajo. Este valor sufrió una fuerte corrección en 2015 y tras varios años de moderada recuperación, la caída del pasado mes de marzo lo situó nuevamente en sus niveles mínimos de los últimos años.

Los últimos resultados publicados corresponden al cierre del segundo trimestre del año en curso. Sus ventas ascendieron a 2.880 millones de dólares americanos (2.600 millones de euros), con un crecimiento en el año del 4,4 por ciento, mientras que su beneficio fue de 1.494 millones de dólares americanos (1.350 millones de euros), cifra significativamente superior a los 867 millones de dólares americanos de beneficio de igual periodo del año anterior.

Entre las principales áreas terapéuticas la línea de fármacos para el tratamiento de la esclerosis múltiple generó unos ingresos en el trimestre de 1.150 millones de dólares americanos (1.050 millones de euros), con un crecimiento en el año del 6 por ciento, mientras que la de tratamiento de la atrofia muscular aportó unas ventas de 488 millones de dólares americanos (450 millones de euros), un 15 por ciento más que el pasado año.

En el primer semestre del año las ventas de este grupo farmacéutico ascendieron a 5.560 millones de dólares americanos (5.000 millones de euros), con un crecimiento en el año del 5,3 por ciento, mientras que el beneficio obtenido ascendió a 2.902 millones de dólares americanos (2.615 millones de euros), superando al del ejercicio anterior en más de un 40 por ciento. Los motivos de este incremento se encuentran en el buen comportamiento de la parte alta de la cascada, así como a un impacto positivo de ingresos no recurrentes de 160 millones de dólares americanos que contrasta con pérdidas no recurrentes de 75 millones de dólares americanos en 2018.

Al apartado de I+D este grupo destinó en los 6 primeros meses del año 1.048 millones de dólares americanos, cifra un 30 por ciento inferior a la del ejercicio anterior. Esta inversión supuso un porcentaje sobre los ingresos del 18,8 por ciento, ratio sensiblemente superior al del promedio del sector.

Para el ejercicio completo 2019 la dirección de este grupo farmacéutico espera alcanzar una facturación que podría superar los 14.000 millones de dólares americanos (12.600 millones de euros), una vez revisada al alza esta estimación, mientras que el beneficio por acción podría superar los 30 dólares americanos.

Para finalizar, y en relación con su posible evolución en bolsa en los próximos meses, los analistas anticipan un comportamiento positivo estimando un precio medio objetivo de 256 dólares americanos, un 12 por ciento por encima de su precio actual.