J. Ruiz-Tagle Madrid | viernes, 03 de noviembre de 2017 h |

Una de las principales conclusiones que ha salido del III Foro ‘Innovación y Sostenibilidad: construyendo la sanidad del siglo XXI’ —donde han participado más de veinte representantes de la administración pública, investigadores, asociaciones de pacientes, sociedades científicas y otros agentes de la salud— ha sido la necesidad de buscar nuevas fórmulas para dar respuesta a la innovación. Una de ellas, que fue trasladada por la ex ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, fue la necesidad de establecer un precio por indicación para los nuevos medicamentos. “Es crítico si hablamos de valor en términos de salud y debe ir acompañado de una financiación selectiva”, dijo la ex dirigente.

Sin embargo, Garmendia —que estuvo acompañada en la presentación de las conclusiones del Foro por la ex consejera de Salud de la Xunta de Galicia, Raquel Mosquera, y por el director general de Celgene, Jordi Martí— también animó a la Administración a “repensar el modelo de innovación y no ir añadiendo capas” según aparecen nuevos retos. Asimismo, instó al Consejo Interterritorial a liderar nuevas vías de colaboración para desarrollar “la contratación pública de la innovación y planes estratégicos”.

Durante la presentación de conclusiones, Mosquera quiso dedicar su intervención a la necesidad de avanzar en el Big Data. “Necesitamos convertir todos los datos que tenemos, que son muchísimos, en información valiosa que se convierta en llave de la innovación”, dijo. Sin embargo, reconoció que existen dos problemas. Por un lado la sensibilidad de los datos y la difícil anonimización de los mismos por el constante conflicto con la Ley de Protección de Datos. Por otro lado, existen barreras por la gestión que hace cada comunidad autónoma, que no suele ser la misma.

Mosquera también solicitó a la industria que comparta la información de la que dispone “de manera leal” para poder trabajar todos juntos en una respuesta para la innovación que está a las puertas del SNS. “Necesitamos entre todos configurar un radar para que la Administración esté preparada ante lo que desarrolla la industria. No puede ser que nos vuelva a coger desprevenidos como con el caso de la hepatitis C”, finalizó.