L. Díaz Madrid | viernes, 11 de enero de 2019 h |

El sector cerró la semana con subidas generalizadas, en contraste con el comportamiento de las últimas semanas de diciembre. De los valores del Índice Global, 22 cerraron en positivo frente a cinco que lo hicieron con pérdidas. Los movimientos más significativos fueron la subida de Pharmamar del 18 por ciento y por el lado bajista Bristol Myers retrocedió un 10 por ciento. El Índice Global se anotó en estas últimas sesiones un avance del 4 por ciento, comportamiento mejor que el de la media de las bolsas.

Abbott fue uno de los valores que cerró en negativo si bien en su caso la pérdida fue muy reducida, de tan sólo un 0,1 por ciento, cotizando actualmente en 69,4 dólares americanos, moviéndose en la franja superior de su rango de variación del último año. Abbott dibujó un perfil alcista entre mayo y septiembre del pasado año, anotándose en ese periodo una ganancia cercana al 30 por ciento. A partir de octubre Abbott entró en una fase de horizontalidad, acompañada de una mayor volatilidad y que lentamente lo ha llevado a perder algunas posiciones. De cara a su posible comportamiento en bolsa en los próximos meses los analistas estiman un precio medio objetivo para un horizonte de 12 meses de 79,6 dólares americanos, un 15,2 por ciento por encima de su actual cotización.

Pfizer cerró la semana con un avance del 0,3 por ciento, cotizando en 43,3 dólares americanos, un valor que se sitúa en la parte alta de su rango de cotización del último año. El perfil de este valor en 2018 fue similar al anterior, destacando una fase de intensa subida entre mayo y octubre, consiguiendo en estos meses una ganancia del 30 por ciento. Tras marcar un máximo a mediados de octubre Pfizer comenzó a moverse horizontalmente, con algunas oscilaciones de cierta intensidad, perfil en el que se mueve actualmente. Los analistas se muestran optimistas sobre el posible comportamiento de este valor en los próximos meses, estimando un precio medio objetivo de 45,3 dólares americanos, un 5 por ciento superior a su precio actual.

Johnson & Johnson se anotó en estas últimas sesiones una ganancia del 1,1 por ciento, acercándose a los 130 dólares americanos, precio que se sitúa en la zona central de su banda de cotización del último año. Su perfil el pasado año dibujó una forma de “U”, comenzando el año con una caída que lo llevó a marcar un mínimo a finales de mayo por debajo de los 120 dólares americanos. A partir de entonces se recuperó, dibujando una fase alcista de, que lo llevó a marcar un máximo a mediados de diciembre cerca de los 148 dólares americanos. En el último mes ha sufrido una fuerte corrección. De cara los próximos meses los analistas estiman un precio medio objetivo de 148,2 dólares americanos, un 15 por ciento más que su cotización actual.

Bristol-Myers cerró su peor semana de los últimos meses retrocediendo hasta los 47,2 dólares americanos, acercándose a su mínimo del año. Este valor dibujó un ejercicio de marcado perfil bajista, comenzando el año cotizando por encima de los 65 dólares americanos y finalizando cerca de los 50 dólares americanos, acumulando en el año una pérdida cercana al 20 por ciento, comportamiento peor que el de la media del sector. Tras estabilizarse en las semanas finales de 2018, BMY comenzó el nuevo ejercicio con un descenso brusco que lo ha situado en sus niveles más bajos de los últimos años. Los analistas estiman un precio medio objetivo de 59,4 dólares americanos, lo que implica un potencial de subida del 25 por ciento, ganancia que no parece guardar relación con la evolución mostrada por este valor en los últimos meses.