No hubo acuerdos en la Comisión de Farmacia del Interterritorial, más bien al contrario. Y mucha imprecisión. Tal y como estaba previsto, varias comunidades plantearon su desacuerdo con el fondo de la resolución del copago farmacéutico hospitalario. Y la gran mayoría, además, mostraron su desacuerdo con la forma. Entendiendo que el problema era de tiempo para adaptar los sistemas de cobro en los hospitales, y tras solicitar fechas para su puesta en marcha, se dio por buena la de enero de 2014, aunque la ministra de Sanidad, Ana Mato, cree que alguna comunidad podría estar lista para el mes de diciembre.
La cuestión, ahora, es saber cuál será la primera región en dar un paso al frente y estrenar a nivel autonómico una medida que todos reconocen no solo como impopular, sino también como bastante ineficaz en términos de ahorro. Incluso Galicia, que no duda en alinearse con la medida del ministerio, trasladó a través de su presidente, Alberto Núñez Feijóo, que el ahorro que traerá es “francamente escaso”.
Las estimaciones de las comunidades autónomas no pueden ser contrastadas con el ministerio, que reconoce no saber cuántos pacientes pueden verse afectados ni qué ahorro puede obtenerse. Pero lo cierto es que el equipo de Mato empieza a esquivar el término ‘ahorro’. En su lugar empieza a cobrar fuerza el carácter obligatorio que tiene la resolución, según la secretaria general de Sanidad, Pilar Farjas; o la ‘equidad’ que persigue, según Agustín Rivero. “La palabra ahorro no es la adecuada, es equidad, en el sentido de que si el hipertenso o el diabético paga parte de la receta en su farmacia, también se deben pagar los medicamentos que se dispensan en las farmacias de los hospitales”, explicó a Efe el director general de Farmacia.
Pero la realidad es que, a fecha de hoy, el copago hospitalario ya está generando inequidades entre servicios hospitalarios y pacientes. Ninguna comunidad pudo responder al reto de adaptar los sistemas de cobro para el 1 de octubre. Pero si lo hizo el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, responsable de la Sanidad en Ceuta y Melilla. A pesar de haber pedido un aplazamiento, desde la semana pasada el copago hospitalario funciona en las dos ciudades autónomas.
En el primer día de aplicación, Ceuta recaudó 24 euros de siete pacientes. Melilla no ha avanzado datos de recaudación, aunque se asegura que la situación en el Hospital Comarcal ha sido de “normalidad”. No obstante, la consejería de Bienestar Social cree “injusto” que se cobre a crónicos. A lo largo de este mes espera tener resuelto un mecanismo de compensación para este colectivo, y que tendrá efectos retroactivos a partir del 1 de octubre.
¿Libre aplicación?
La Comisión de Farmacia tampoco dejó clara la postura del ministerio en cuanto a las comunidades rebeldes. En plena vorágine previa al 1 de octubre, desde el departamento de Mato se trasladó la idea de que aplicar o no la resolución sería cosa de cada comunidad, a pesar de su carácter obligatorio. Pero, según explican desde la consejería de Sanidad de Canarias, en la Comisión de Farmacia el ministerio volvió a hablar de “la obligación de cumplimiento (de la resolución), pero no de las medidas que adoptaría en caso de no aplicación”. Después de Andalucía, los servicios jurídicos del Gobierno de Canarias se encuentran realizando un recurso de alzada contra la resolución del copago farmacéutico hospitalario.
Ceuta recaudó 24 euros de siete pacientes durante el primer día de aplicación del copago hospitalario
Sanidad habló de la obligación de cumplir la resolución pero no de las medidas que tomará ante la no aplicación
La polémica por el copago hospitalario ha trascendido las barreras nacionales. El eurodiputado socialista Andrés Perelló ha presentado una interpelación parlamentaria a la Comisión Europea sobre este asunto, al tiempo que en España se intenta frenar la iniciativa desde varias vías. El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) ya ha interpuesto un recurso de alzada; y Gaspar Llamazares ha anunciado otro recurso de la Izquierda Plural. El Partido Aragonés, socio de gobierno del PP, ha presentado una proposición no de ley para dejar sin efecto el copago. Lo mismo ha hecho el PNV en el Congreso .
