| martes, 17 de septiembre de 2013 h |

La Rioja y el País Vasco han aparcado sus diferencias en materia sanitaria. Tras la instantánea protagonizada en febrero de este año por los consejeros de Sanidad de ambas regiones, José Ignacio Nieto y Jon Darpón, ahora les ha tocado el turno a los presidentes regionales. El convenio firmado por el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el presidente de La Rioja, Pedro Sanz, pretende garantizar la accesibilidad y la equidad de los ciudadanos de ambas comunidades a la asistencia sanitaria, resolviendo así un conflicto de etapas anteriores, cuando la comunidad riojana se negó a atender a pacientes limítrofes.

En la firma del acuerdo, calificado calificado de “histórico” por sus firmantes, también estuvieron presentes los consejeros de Sanidad y los secretarios generales de la Presidencia de ambas regiones. El convenio tendrá una duración de tres años, y podrá prorrogarse por periodos anuales.

El pacto recoge que el Servicio Riojano de Salud prestará atención especializada a los pacientes que se deriven por los facultativos de atención primaria de Osakidetza-Servicio Vasco de Salud que residan en los siguientes municipios de La Rioja Alavesa: Baños de Ebro, Elciego, Elvillar, Kripan, Labastida, Laguardia, Lanciego, Lapuebla de Labarca, Leza, Moreda de Álava, Navaridas, Oyón-Oion, Samaniego, Villabuena de Álava y Yécora, que cuentan con una población de referencia de 11.500 personas. Hasta el pasado 31 de agosto, unas 3.500 personas residentes en estos municipios han recibido atención sanitaria en La Rioja.

Por su parte, el Servicio Vasco de Salud prestará a los ciudadanos residentes en La Rioja servicios de alta especialización, tales como transplante renal infantil, cirugía infantil, cirugía de la obesidad, implantes cocleares, algunas técnicas de cirugía plástica y reparado, Unidad de Quemados, etc., que La Rioja, por capacidad demográfica y número de atenciones que precisa cada año, no puede poner en marcha, y de los que podrían beneficiarse alrededor de 500 pacientes riojanos.