Alberto Cornejo Madrid | viernes, 20 de noviembre de 2015 h |

Infrafinanciación. Esa es la palabra —o denuncia— más repetida por la profesión en los últimos años al analizar los presupuestos que, ejercicio tras ejercicio, han asignado las Administraciones regionales para el gasto en recetas. Por ello, la aparición de impagos en algunas comunidades ni tan siquiera sorprendían a sus farmacéuticos. “Desde que en enero conocimos el presupuesto ya se supo que no llegaría para todas las mensualidades”, indicaba recientemente a EG el presidente del COF de Teruel, Antonio Hernández, tras conocerse que su Consejería de Sanidad se había quedado sin liquidez para nuevos pagos en este tramo final de año.

Sin embargo, la farmacia nacional podría estar viendo la luz al final del tunel y despedir esta ‘era de la infrafinanciación’. En el análisis de los proyectos de presupuestos para 2016 que ya han presentado las CC.AA. se atisba cierto ‘ataque de realismo’ en las partidas para abono de recetas. Salvo escasas excepciones (ver tabla) la mayoría de ellas aumentan las cantidades destinadas a este capítulo. Tanto las que no han convivido con impagos en en el actual ejercicio y desean un mayor colchón de seguridad (con incrementos que incluso superan el 5 por ciento, como Madrid) como también donde sí se han padecido y quieren atajar este problema.

A la cabeza de estas últimas regiones se sitúa Comunidad Valenciana. Después de tres años arrastrando una deuda cíclica con sus farmacias que actualmente abarca una mensualidad, su presupuesto para gasto farmacéutico en 2016 contiene un incremento del 16 por ciento (195 millones de euros más). ¿Suficiente? Al menos debería serlo para frenar la sangría de la deuda. En el mejor de los casos para poner el contador ‘a cero’, con la inestimable colaboración del recién aprobado FLA extraordinario.

Otras regiones que han fallado en los últimos tiempos con sus obligaciones de pago a las farmacias tienen por objetivo acabar 2015 sin ‘sustos’ a sabiendas que 2016 vislumbra, cifras en mano, cierta tranquilidad. Este sería el caso de Baleares, donde se consiguió normalizar el pago de recetas en enero de 2015 y que ha presupuestado un 9,3 por ciento más en el próximo ejercicio (de 157,5 a 172,3 millones de euros). Aragón no ha presentado aún su proyecto, pero los colegios farmacéuticos tendrían el compromiso de su Administración de que se asignará una “partida realista” con el gasto en esta región. Cabe recordar que Aragón presupuestó 252 millones de euros para el pago de recetas en 2015, pese a que el ejercicio precendente se había cerrado con un gasto de 291,9 millones de euros.

Pero la felicidad no es completa. La ‘rompe’ Murcia, donde se atisba nuevamente infrafinanciación, aunque ha aumentado esta partida un 7 por ciento. Algo semejante ocurrirá en Cataluña, con el agravante de ser la región que más deuda acumula con sus boticas (330 millones de euros). Aunque tampoco ha presentado sus presupuestos al estar en proceso de formación de Gobierno, pero el consejero de Sanidad en funciones, Boi Ruiz, ya adelantaba en una entrevista a EG que “no podemos decir que el año que viene vaya a haber más dinero”.