Alberto Cornejo Madrid | miércoles, 18 de marzo de 2015 h |

El nuevo concierto de prestaciones farmacéuticas firmado el pasado 13 de marzo por la Consejería de Sanidad de Madrid y el colegio farmacéutico regional (que deberá ser ratificado por los colegiados en la asamblea del próximo día 30) presenta una principal novedad económica respecto al texto hasta ahora vigente: la supresión del descuento del 10 por ciento en la facturación que debían realizar las oficinas de farmacia que suministrasen a centros sociosanitarios.

“Este descuento estaba perjudicando a 300 farmacéuticos y no podíamos firmar un nuevo concierto que perjudicase a uno o 300 compañeros” ha indicado el presidente del colegio madrileño, Luis González, durante una convocatoria celebrada este 17 de marzo para presentar el nuevo documento. La supresión de este polémico descuento —‘moneda de cambio’ por la cual la Consejería mantenía la prestación de este servicio por la farmacia comunitaria— deja paso ahora a la obligatoriedad de que la farmacia suministradora preste “ciertos servicios profesionales” a los pacientes de la residencia relacionados con sus mejores resultados en salud: programas de adherencia, seguimiento…

Según el balance que hace Luis González, las negociaciones con la Consejería que se han alargado durante medio año “han dado como resultado un buen concierto que abre 4 años de tranquilidad para la oficina de farmacia”. Respecto a otros de sus puntos económicos, el nuevo texto recoge el pago de facturas a las boticas “entre el día 17 y 20 del mes siguiente al que corresponda la factura”. En este sentido, también se mantiene una “cláusula de salvaguarda” que ya figuraba en el anterior texto por la cual, si la Administración incumple sus compromisos de pago “el colegio pone a disposición de los titulares un crédito cuyos costes adicionales serían asumidos y abonados en el siguiente ejercicio por la Consejería de Hacienda”, ha detallado el director general de la corporación madrileña, Carlos Ibáñez. Otra de las positivas novedades que incorpora el nuevo texto, válido hasta 2019, es una actualización al alza de las tarifas de fórmulas magistrales.

Respecto al contenido asistencial, será una Comisión de Seguimiento (formada por cuatro representantes de cada parte) la que desarrolle posibles nuevos servicios a prestar por las oficinas de farmacia madrileña, los cuales se considera desde el COF de Madrid que deben ser retribuidos. No obstante, “para retribuir nuevos servicios, primero hay que demostrar que son rentables”, indica Óscar López, vocal de Oficina de Farmacia del COF de Madrid. Por ello, cualquier futuro servicio se desarrollará con un pilotaje previo que debe evaluar su impacto sanitario y económico, siendo responsabilidad de dicha comisión fijar los protocolos, la capacitación y los indicadores sanitarios y económicos sobre los que medir la experiencia.

“Vamos a dar mucho trabajo a la oficina de farmacia”, avisa González, quien, respecto a la retribución de dichos servicios, lo tiene claro: “es de justicia que el ahorro que generen a la Administración, ésta lo comparta con las farmacias”.