Alberto Cornejo Madrid | viernes, 16 de junio de 2017 h |

Más de 43.500 ciudadanos andaluces, entre profesionales sanitarios y pacientes, han dejado constancia por escrito de su oposición a las subastas de medicamentos. Lo han hecho por escrito, con sus firmas. Todas ellas fueron entregadas el 13 de junio por la Asociación de Farmacéuticos Andaluces (Afaran) al Defensor del Pueblo.

Esta entrega de firmas complementa a la queja que también tiene presentada Afaran en esta misma institución contra este modelo y cuya tramitación sigue abierta. Cabe recordar que recientemente, el Defensor del Pueblo, Soledad Becerril, pidió más información a la Junta de Andalucía sobre este mecanismo antes de pronunciarse. En declaraciones a EG tras la entrega de estas firmas, la presidenta de Afaran, Teresa Martín, ha vuelto a pedir directamente “a Susana Díaz” —la presidenta de la Junta— que atienda al “clamor” de los farmacéuticos y pacientes contra este modelo y retire este sistema “que genera grandes perjuicios a los andaluces frente al resto de España y no genera los ahorros que se pregonan”.

Aunque pueda parecer una incongruencia, Martín considera que la supresión de este modelo debería ser interpretado por la propia presidenta de la Junta como una “victoria” que anotarse en su haber. “La retirada de las subastas no debe ser visto por Susana Díaz como una derrota, porque estaría demostrando sensibilidad con la petición de la ciudadanía y los profesionales sanitarios”.

Cuestionada sobre si el reciente cese de Aquilino Alonso como consejero de Salud y la llegada de un rostro nuevo (Marina Álvarez) abre nuevas esperanzas en esta lucha, la presidenta de Afaran quita protagonismo al máximo dirigente de la cartera sanitaria andaluza para señalar nuevamente a Díaz. “Es ella, como presidenta quien tiene la llave para cambiar esta situación; no puede estar ajena en su despacho al problema que están generando las subastas”, apunta.

Cinco años después de que se implantase este sistema de selección pública de medicamentos, desde Afaran se considera que “ya es tiempo suficiente para corroborar que no ha funcionado”, apunta Martín citando, entre otros factores los escasos ahorros, desconfianza de los profesionales con la calidad de las presentaciones adjudicadas y la falta de adherencia. Asimismo, critica la falta de apoyo que está encontrando su asociación en esta lucha por parte de otras entidades. “Hemos recibido más apoyo fuera de Andalucia que por entidades como el Consejo Andaluz de COF”, dice.