Alberto Cornejo Barcelona | viernes, 22 de marzo de 2019 h |

Pese a que hay que tener en cuenta la incertidumbre que aún rodea el proceso de salida de Reino Unido de la Unión Europea, tanto en plazos como formas, la Agencia Española del Medicamento (Aemps) no prevé que el Brexit, se materialice como sea, acarree “impacto alguno” en las 22.079 farmacias comunitarias nacionales. En especial, en lo que respecta a posibles desabastecimientos de medicamentos que, dicho sea de paso, ya sufren las farmacias nacionales sin Brexit mediante.

Esta llamada a la tranquilidad fue realizada por Belén Escribano, jefa del Departamento de Inspección y Control de Medicamentos de la Aemps, durante una mesa redonda que analizó las posibles consecuencias del Brexit para el sector, celebrada en la jornada de clausura (21 de marzo) de Infarma Barcelona 2019. “Ninguno de los actuales problemas que tenemos en España con los desabastecimientos están relacionados en la situación actual en torno al Brexit ni esperamos que los haya cuando se concrete la salida”, apuntó Escribano.

A lo sumo, sí puede haber cambios en la forma en la que los ciudadanos británicos, bien en la condición de visitantes o residentes en España, accedan a la prestación farmacéutica y la adquisición de medicamentos en las farmacias españolas. Cabe recordar que algunas boticas ubicadas en zonas concretas costeras atienden a numerosa población británica.

En este sentido, la relación de los británicos con las farmacias españolas y el SNS variará según su status quo (turistas o residentes), tal y como explicó en esta mesa Corinne Zara, miembro de la División de Acción Territorial del Medicamento del Catsalut. Por el momento, y al margen de cómo se concrete la salida de Reino Unido de la Unión Europea, se ha abierto un periodo de prórroga hasta 2020 en el mantenimiento de los derechos actuales que recoge la Tarjeta Sanitaria Europea para aquellos turistas británicos que la posean. Esta tarjeta es voluntaria e independiente a los seguros de viaje. En la adquisición de medicamentos consecuencia de una atención médica, el Estado financia el 50 por ciento del coste y el usuario con TSE el otro 50 por ciento.

Por su parte, los británicos residentes en España tendrán derecho, como hasta ahora, a recibir recetas médicas oficiales del SNS que, obviamente, pueden adquirir en cualquier establecimiento de la red nacional. Eso sí, con su correspondiente nivel de copago, concretó Zara.