La vocalía nacional de Dermofarmacia del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) ha celebrado la IV Jornada Nacional de Dermofarmacia’, un congreso bienal que se ha convertido en todo un referente en el mundo de la farmacia y que ha congregado a 500 asistentes. El acto ha sido inaugurado por Cristina Tiemblo, vocal nacional de Dermofarmacia y por Rosa López-Torres, tesorera del Consejo General. Tiemblo aseguraba que “esto es un suma y sigue, no vale estancarse y hay que ir ampliando la formación. Tenemos que trabajar para que el usuario acuda a la farmacia a por el consejo profesional y ese consejo hay que darlo bien, no valen cosas a medias. Por eso estamos aquí porque queremos aprender”. Por su parte, López-Torres indicaba que “esta jornada completa y ayuda al farmacéutico que cada vez es más responsable y profesional”.
María Jesús Lucero, profesora del Departamento de Farmacia de la Universidad de Sevilla, ha sido la encargada de abrir la jornada y abordar las características del pH en la piel y el pelo. A tal efecto a señalado que ”la piel es el órgano más extenso del cuerpo humano y por ello tiene tanta importancia, porque cubre todo el exterior del organismo”. Lucero aclaraba que el pH de la piel no es 5.5, tal y como está establecido, porque cada zona tiene un pH diferente y además hay factores que hacen que el pH varíe como la edad, la genética, la raza o el sexo. Asimismo, Lucero hacía un llamamiento para incitar a los laboratorios a que publiquen el pH de los productos cosméticos “para saber qué pH tiene cada producto y así saber cuál recomendar para cada afección dermatológica. A veces no se tiene éxito en el tratamiento porque no conocemos ese parámetro, y eso es fundamental”.
Consejos en alopecia
A lo largo de la jornada , los dermatólogos han cogido la palabra. Concretamente Sergio Vañó, del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid quien ha hecho un repaso sobre esta patología. “Que se caiga el pelo no es sinónimo de alopecia. Alopecia es perder densidad del pelo”, advertía al mismo tiempo que explicaba que “hay más de 100 tipos de alopecia, debido a causas hormonales, genéticas, producidas por dietas o fármacos. Es imprescindible un buen diagnostico para realizar el tratamiento correcto”, sostenía.
En ese sentido, Vañó avanzaba a los profesionales presentes el manejo de la alopecia más común, la alopecia androgénica cuyos tratamientos son, o bien con Minoxidil tópico (aumenta circulación y sus efectos adversos son irritación y crecimiento de vello en otras zonas) y Finasterida o Dutasterida oral. (Inhibe andrógenos y sus efectos adversos son disminución de la líbido e impotencia transitoria). El dermatólogo resaltaba el papel de la oficina de farmacia, algo fundamental porque “es el primer nivel de consulta de muchos pacientes y debe de dar un mensaje homogéneo junto al médico. El farmacéutico es un muy buen consejero y debe aconsejar sobre plazos y terapias”.
