Alberto Cornejo Madrid | viernes, 18 de noviembre de 2016 h |

A pesar de los recursos y esfuerzos que vienen dedicando en los últimos años los mayoristas farmacéuticos para adaptarse a las Buenas Prácticas de Distribución (BPD), los servicios de Inspección autonómicos dicen seguir detectando “gran cantidad de incumplimientos” de estas directrices. Así lo manifestaron varios jefes de estos servicios regionales (Madrid, Castilla-La Mancha y Canarias) en PharmaLog 2016, evento celebrado el pasado 15 de noviembre en Madrid por iiR España.

“Tres años después (de la introducción de estas directrices vía RD 782/2013) seguimos detectando gran cantidad de incumplimientos de las BPD, que nos impide emitir las certificaciones a los almacenes”, apuntó Julián Vieco, jefe del Servicio de Inspección de la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha, como ejemplo de este sentir general de la inspección. Las principales deficiencias detectadas serían el incumplimiento de los requisitos del lote —“ningún almacén inspeccionado que surte a farmacias lo cumple”, reflejó—, así como la “no cualificación” del control de la temperatura en el transporte. En este sentido, cabe recordar que el sector de la distribución nacional viene reclamando mayor flexibilidad en las exigencias de control de temperatura de transporte, dado el escaso tiempo que emplean la mayoría de rutas nacionales (en algunos casos el fármaco apenas tarda unos minutos en llegar del almacén a la botica) y los altos costes que supone el equipamiento de la flota de vehículos para este control.

A las deficiencias sobre el control de temperaturas también aludió en la jefe de Inspección del Servicio Canario de Salud, Lourdes Mayo. En torno al 40 por ciento de las desviaciones detectadas en las inspecciones en esta región versan sobre locales y equipos, expuso Mayo.