| viernes, 22 de septiembre de 2017 h |

La toma de posesión de Luis de Palacio como presidente de FEFE ha significado un antes y un después en la historia de la patronal nacional. Un acto en el que prácticamente estuvo representado todo el sector farmacéutico. Las ausencias de la industria o la administración central, no consiguieron deslucir un acto en el que se dieron pasos importantes para conseguir que FEFE recupere un papel protagonista. La necesidad de contar con una patronal fuerte ha llevado a De Palacio a conformar una Comisión Permanente equilibrada y con capacidad operativa donde cada uno de sus miembros tendrá su papel protagonista con las prioridades bien definidas. Y no solo eso, el discurso del nuevo presidente de FEFE sirve para sentar las bases de ese renacimiento que busca la utilidad de una patronal al servicio de sus asociados que se complementaria con el resto de instituciones farmacéuticas. Encontrar su sitio, tener visibilidad y poder ser parte importante de las decisiones que aseguren una farmacia fuerte, comprometida y alineada en pos de objetivos comunes. Y todo, desde el sentido común. La presencia del presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos, Jesús Aguilar, supone también un gesto que llama a la colaboración, tras años de cercano distanciamiento. Teniendo claras cada uno sus funciones, es más que evidente que esa mano tendida dará sus frutos.

Se inicia pues una nueva andadura en FEFE con un primer objetivo claro centrado en recuperar representatividad a través de la suma de nuevos asociados. Para ello, se retomarán conversaciones con otras asociaciones y se buscará esa utilidad necesaria para conseguir esa necesaria masa crítica que asegurará influencia y poder de decisión.

FEFE apuesta por FEFE y eso sólo puede significar un futuro mucho más prometedor para una institución necesaria para la farmacia española. Suerte.

Luis de Palacio ha conformado una Comisión Permanente equilibrada y con capacidad operativa