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La espera ha merecido la pena. Un consejo que sigue contando con personas clave y de amplia experiencia sanitaria debe ser aprovechado para abordar los asuntos clave que afronta la sanidad. El Senado puede tener el mérito de haber prendido la mecha con la medicina de precisión y la ponencia que está desarrollando, pero el mensaje ha llegado a Sanidad: los primeros trabajos que encargará Valentín Fuster al Consejo serán una estrategia nacional de cáncer y corazón y la gestión del conocimiento a través del Big Data. El tercer asunto a abordar cierra el círculo: cómo adaptar la cartera de servicios a la medicina personalizada. Pero hay más novedades: la ministra Dolors Montserrat quiere implicar al Consejo Asesor de Sanidad en el CISNS, participando en algunas reuniones del mismo. Precisamente, Ana Pastor en 2003 siendo ministra de Sanidad, solicitó al Prof. Eduardo Diaz-Rubio que presentara el Plan Nacional de Cáncer al Interterritorial. Son iniciativas que fomentan la comunicación y la transparencia, y permiten que el fruto del trabajo del Consejo Asesor se traslade sin interferencias, lo que facilitará la confianza de las CC.AA y sus reacciones a las conclusiones de dichos trabajos.Pero aún es pronto para saber si los trabajos irán a la velocidad necesaria. Durante 2018, sin duda, se abordarán asuntos vitales que obligan a repensar al sistema sanitario, y abordarlos desde diversas instituciones es garantía de un resultado creíble.
