No se ha producido la polémica de otras ocasiones con los algoritmos de prescripción terapéutica. La Consejería de Sanidad de la Comunidad Valenciana y las sociedades científicas de Psiquiatría y Neurología han alcanzado un consenso sobre la utilización de pregabalina, antipsicóticos y antidepresivos, una circunstancia que no se había producido hasta ahora.
Han pasado cuatro meses desde que el departamento que dirige Manuel Llombart publicara los borradores de estos tres algoritmos. Entonces los profesionales expresaron su temor en las alegaciones de que estas iniciativas pusieran en riesgo la libertad de prescripción como habían denunciado compañeros de otras especialidades. Tras la publicación de los tres documentos, el miedo de los profesionales de Psiquiatría y Neurología parece haberse desvanecido. No obstante, todavía existen discrepancias con otros especialistas que reiteran que los algoritmos se han convertido en un obstáculo para la libertad de prescripción del médico.
La percepción de Psiquiatría y Neurología es opuesta, una vez que se han publicado los tres algoritmos con fecha de 30 de junio. “No ha habido una gran repercusión en la práctica clínica y creemos que se respeta la libertad de prescripción”, expresa Francisco Bellver, vocal de la Junta Directiva de la Sociedad de Psiquiatría de la Comunidad Valenciana (SPCV) y que participó como técnico en la elaboración de estos algoritmos.
En el caso de la Sociedad Valenciana de Neurología (SVN) existe todavía alguna duda con respecto a cómo afectará esta medida a la profesión médica. “Libertad completa al 100 por cien no existe, pero sí dentro de las normas y pautas razonables”, destaca su presidente, Carlos Vilar.
Cuatro meses de conversaciones
Entre febrero y junio, médicos y Comunidad Valenciana han pulido sus diferencias, lo que ha generado la satisfacción de las sociedades científicas con los resultados cosechados en el proceso. Los profesionales consideran que se ha escuchado su punto de vista. “Creemos que recogen la evidencia científica y criterios económicos”, añade Vilar.
En el caso de Neurología una de las alegaciones consistía en la utilización de pregabalina para el tratamiento del dolor neuropático central. En el borrador estaba prevista como segunda y tercera opción. En el texto publicado el pasado 30 de junio ya aparece como primera opción como habían reclamado los neurólogos.
Sólo se ha producido una discrepancia en la que ya trabajan los profesionales con la Consejería de Sanidad: la utilización de antipsicóticos ‘off label’ para determinadas patologías como pueden ser la paranoia o la demencia. “El seguimiento del real decreto de 2009 para prescribir medicamentos fuera de ficha técnica es lo que está enlenteciendo el sistema informático”, destaca Bellver, quien insiste en que ha existido “una gran colaboración con la consejería”.
La Comunidad Valenciana insiste en que no se han producido diferencias con respecto a otros algoritmos. “Los consensos terapéuticos con el formato y la denominación que se le quieran dar los llevamos utilizando desde hace años en la Administración valenciana”, señala el director general de Farmacia, José Luis Trillo, quien subraya que el fin es lograr “una evolución de las clásicas guías hospitalarias o del ámbito privado para modificar esas directrices y esos consensos y dirigirlos más a las patologías”.
