o. m. Gerona | viernes, 22 de junio de 2012 h |

Joan Fajula es el único presidente de un colegio catalán de farmacéuticos que tuvo que afrontar unas elecciones para llegar al cargo, tras recibir más apoyos que Lluís Pla en las elecciones celebradas recientemente. A la espera de tomar posesión (26 junio), analiza el futuro del COF de Gerona.

Pregunta. Sustituirá a Carles Conejero. ¿Qué destacaría de él?

R. Su trabajo y su dedicación. Ha gobernado el colegio en una época en que han sido posibles innovaciones, como el inicio de la receta electrónica. En cambio, al final de su mandato le han tocado tiempos difíciles.

P. Tiempos a los que usted se deberá enfrentar. ¿Cómo?

R. Con ilusión, implicación y dedicación. Con la ayuda de la nueva junta de gobierno, un grupo de personas capacitadas y comprometidas en trabajar para la consecución de los objetivos que nos hemos marcado. Escuchando las aportaciones de los colegiados intentaremos prestigiar la profesión farmacéutica en un momento de grandes dificultades económicas que han repercutido directamente en la oficina de farmacia.

P. Y el objetivo prioritario…

R. Defender los intereses del colegiado en todos los ámbitos profesionales y en todas aquellas tareas que le son propias como técnicos del medicamento y del producto sanitario. En concreto, para la oficina de farmacia, estudiar alternativas adicionales al actual sistema de retribución, como la remuneración a servicios prestados, intentando unificar criterios con el Consejo de Colegios Farmacéuticos de Cataluña. La intención es trabajar con transparencia y honestidad, estableciendo nuevas vías de diálogo para defender los intereses de la mayoría.

P. ¿Cuál es la característica que define a la farmacia gerundense?

R. Es difícil encontrar una característica común. En general, es una farmacia muy ligada al territorio, con una importante implantación en las zonas rurales y con un prestigio importante en el ámbito de primera línea de asistencia sanitaria. Coexisten las farmacias de pequeños pueblos, con grandes farmacias. Boticas de zonas turísticas de ciudades entre diez y 30.000 habitantes y las de la ciudad de Gerona. Esta variedad da lugar a características y problemáticas diferentes.

P ¿Es un reto tener un volumen inferior al millar de colegiados?

R. Lo considero una circunstancia positiva en la gestión del colegio, con ventajas claras para mantener excelentes relaciones con todos los colegiados. La relación con el colegiado puede ser más fluida y próxima.

P. Lo que parece evidente es que no es el mejor momento para ponerse al frente de un colegio de farmacéuticos, ¿verdad?

R. Evidentemente, vivimos en tiempos difíciles, pero no solo en el sector farmacéutico. El nuestro en concreto ha sido un sector muy castigado desde hace ya muchos años por las medidas de reducciones presupuestarias adoptadas por la administración. Tenemos que intentar inyectar una dosis de optimismo a nuestro sector, buscando nuevas oportunidades y trabajando para conseguir que se valore nuestra labor a nivel profesional y económico, para conseguir la estabilidad necesaria que nos permita pensar en un futuro sin temores a futuras restricciones económicas

P. Por lo menos, en Cataluña no hay más retrasos en el pago, ¿no?

R. Me induce a pensar que la administración, en concreto la Generalitat, es consciente de la situación y que sabe que si adopta nuevas medidas que afecten a las oficinas de farmacia, se va a poner en peligro la calidad del sistema y la viabilidad económica de muchas oficinas de farmacia. Por tanto, tengo que ser optimista en este sentido y espero que un futuro próximo nos depare un periodo de estabilidad económica.